Justo cuando pensábamos que habíamos sobrevivido al último drama de Marte retrógrado, ¡bam! Venus decide que es hora de un “plot twist” astral. Sí, mis queridas lectoras, nuestra querida Venus, que venía de un idilio pisciano de ensueño, ha decidido retroceder en Aries desde el 1 de marzo de 2025. ¿El resultado?, la pregunta de si ¿Somos lo suficientemente auténticos con nuestro “significant other” y con nosotros mismos? Si la respuesta es un tímido “quizás”, prepárense para una temporada de confesiones y, quién sabe, quizás hasta un cambio emocional de perspectiva diametral.
¿Qué significa el planeta Venus en la astrología?
Antes de que Venus retrógrado nos ponga a todos a revisar nuestras relaciones como si fueran borradores de un correo electrónico importante, hablemos un poco de los múltiples significados de Venus en la astrología moderna.
Algunos asocian al segundo planeta de nuestro sistema solar, con cargas emocionales, sensibilidad y, digamos, esa capacidad para sentirlo todo un poquito más. Venus nos invita a la delicadeza, la percepción sutil y esa sofisticación que, seamos honestas, a veces se nos escapa entre el caos del día a día. Es la musa que dirige nuestros dones creativos, las relaciones que atraemos y otros aspectos de nuestra vida, como decidir qué vamos a cenar.
En la astrología clásica, Venus representa la belleza interior y el lado femenino que reside en cada uno de nosotros, ese lado que a veces necesita un empujoncito para brillar.
Pero el punto álgido de la energía venusina, el que nos convoca aquí, es su conexión arquetípica con nuestras relaciones interpersonales. Y quiero que estén seguras de que no hablamos solo de romances, sino también de los grupos a los que pertenecemos, amistades, familia, colegas e incluso nuestras interacciones con desconocidos. Todo esto puede verse afectado o revisado por los movimientos y aspectos de Venus en el sistema solar.
¿Qué significa Venus Retrógrado y cómo influye en la vida?
De forma simple y llana, cuando Venus decide que es momento de revisar el contrato de nuestras relaciones, o sea, cuando retrograda, hablamos de un tránsito que ilumina ciertas áreas de nuestra carta natal, como si de repente encendiera la luz en el desván de nuestros secretos emocionales.
Y claro, el tema principal de esta inspección son nuestras relaciones, el amor y, digamos, esa capacidad para apreciar la belleza que a veces se nos escapa entre las sombras de la duda. En este momento, la invitación es clara: sé tú misma, exprésate tal cual eres, honra tu ser. Como si te dijeran: “Adelante, desempolva tu verdad”.
De igual forma, nos invita a reflexionar sobre el tipo de amor que nos damos a nosotros mismos y a los demás, y a poner ambos significados en una balanza.
De ahí que Venus sea regente de Libra (y de Tauro). Porque, seamos honestos, a veces necesitamos un recordatorio cósmico de que el equilibrio es la clave. Incluso cuando la vida se siente como un laberinto sin salida.
¿Qué efectos tiene Venus Retrógrado en marzo de 2025?
La retrogradación de Venus siempre tiene mucho que ver con el signo donde decide tomarse unas vacaciones, o, más bien, un retiro espiritual introspectivo. En este caso, serán dos destinos: Aries, el hogar natural de Marte, cuya retrogradación nos dejó con una sensación de lentitud digna de una película de arte experimental a finales de 2024 y principios de 2025, y Piscis, donde tenemos un stellium digno de una sesión de espiritismo, con Saturno, Neptuno, Sol y Nodo Norte reunidos.
Lo primero que debo advertirles, con todo cariño, es que estas dos áreas de sus vidas, donde residen estos signos, sufrirán una transformación visible en los próximos años. No solo porque Venus estará retrogradando allí desde el 2 de marzo hasta el 13 de abril de 2025. Sino, porque, como les mencioné en la sesión de terapia astral del mes de Piscis, las casas donde habitan Piscis y Aries estarán experimentando el tránsito de planetas transpersonales. Esos que marcan finales y comienzos tan grandes que podrían hacer temblar los cimientos de nuestra realidad.
Y el primer acto de este drama cósmico será protagonizado precisamente por las retrogradaciones de Venus y Mercurio en esta temporada de eclipses. Ambos comenzaron su viaje introspectivo en el grado 9 de Aries, activando el grado matemático del eclipse solar del 29 de marzo en el eje nodal Aries-Libra. Lo que hace que estas retrogradaciones sean determinantes. Ya les dije en algún momento que, al final de este show, reflexionaremos sobre si el valor único que poseemos, aquello que damos como nadie más, está siendo honrado y reconocido en cada una de nuestras relaciones interpersonales.
¿Qué no hacer en Venus retrogrado?
Ninguna retrogradación puede parar los aspectos mundanos de nuestra vida. Estos periodos, sean de Venus, Mercurio, Marte, etc., deben ser considerados como momentos de reflexión.
Pero si debemos hablar de los “Don´t do it”, estos van a estar íntimamente relacionados con el signo y la casa donde esté en ese momento la retrogradación del planeta en cuestión.
Así por ejemplo, teniendo en cuenta las temáticas Venusinas, si no encontramos obligatoriedad en firmar contratos, de trabajo o de compra-venta, iniciar nuevas relaciones o hacer cambios estéticos drásticos, es mejor que estos compromisos los aplacemos hasta después del 13 de abril de 2025, cuando el ambiente astral recupere un poco más de estabilidad y tengamos todos los planetas directos.
¿Cómo aprovechar la energía de Venus Retrógrado de forma positiva?
El mejor consejo que puedo darles durante esta temporada (aunque me he encontrado dándolo, y dándomelo, en diferentes etapas de mi vida, como si fuera un mantra existencial) es: sepan irse a tiempo, sepan dejar de ocupar un lugar que no es para ustedes. Es justo con la otra persona y con ustedes mismos que sepan decir cuándo es suficiente y cuándo las cosas no están funcionando, como cuando te das cuenta de que estás bailando solo en una fiesta donde la música ya se detuvo.
Pero esto no es solo en relaciones amorosas, ni siquiera en otros tipos de relación. También háganlo en otros aspectos de su vida. Si hay un trabajo que no los está llenando, déjenlo ir. Si hay un negocio que no les está cuadrando, recapaciten y ciérrenlo, como si cerraran un capítulo de un libro que ya no les interesa. Recuerden que a veces lo mejor es cambiar de ruta para llegar a nuestro destino, y estoy seguro de que este tiene muy buenas cosas preparadas para ustedes, aunque quizás algunas de ellas vengan disfrazadas de lecciones dolorosas.
