Durante años, Hannah Montana fue sinónimo de pelucas rubias, conciertos secretos y la promesa de tener lo mejor de ambos mundos. Pero para Miley Cyrus, quien dio vida a la adolescente con doble identidad en la exitosa serie de Disney Channel, el legado de Hannah venía acompañado de límites —incluso legales— que le impidieron cantar sus propias canciones durante más de una década.
¿Por qué Miley Cyrus no podía interpretar las canciones de Hannah Montana después de salir de Disney?
Cuando Miley Cyrus terminó su etapa en Hannah Montana y salió de Disney, firmó contratos que separaban los derechos de las canciones de la serie de su carrera musical personal. Estos acuerdos cedían a Disney y a su sello Hollywood Records el control exclusivo sobre el repertorio de Hannah Montana, lo que impedía que Miley interpretara esas canciones en sus conciertos o lanzamientos fuera del universo Disney.
¿Qué cláusulas contractuales impidieron a Miley cantar su propio repertorio?
Durante su adolescencia, Miley firmó contratos que protegían la marca y la música de Hannah Montana como propiedad exclusiva de Disney. Estas cláusulas limitaban su libertad para utilizar ese material fuera de contextos autorizados por la compañía. Aunque la voz y la imagen eran suyas, la interpretación pública de esas canciones estaba sujeta a la autorización formal de Disney, que no fue concedida hasta 2024.
¿Cómo afectó esta prohibición a la carrera musical de Miley Cyrus?
Aunque Miley no tenía intención de mezclar sus dos etapas —la infantil con la adulta— el impedimento le generó un contraste irónico: canciones con su voz y rostro, pero que ella no podía cantar en sus giras o presentaciones. Este bloqueo fue para ella una especie de silencio forzado respecto a una parte esencial de su historia artística.
¿Qué cambió en 2024 para que Miley pudiera volver a interpretar esas canciones?
El cambio se produjo cuando, en agosto de 2024, Miley Cyrus fue reconocida oficialmente como Disney Legend durante la convención D23. Este honor no solo celebró su impacto en la compañía, sino que también le otorgó permiso para volver a cantar las canciones de Hannah Montana, abriendo la puerta a reconciliarse con ese legado que durante años le estuvo vedado.
¿Qué significa para Miley Cyrus ser reconocida como Disney Legend?
Ser nombrada Disney Legend es un reconocimiento reservado a figuras que han dejado una huella duradera en la historia de Disney. Para Miley, esta distinción representó un gesto simbólico y real de revaloración de su paso por la franquicia, un permiso para reivindicar su identidad artística completa y un homenaje a la niña y la mujer detrás de Hannah Montana.
¿Cuál fue el impacto cultural y comercial de Hannah Montana durante su auge?
Hannah Montana no solo fue una serie de éxito televisivo; fue un fenómeno global que incluyó álbumes multiplatino, giras sold out y una película taquillera. La marca generó miles de millones en ventas de productos licenciados y consolidó a Miley como una estrella juvenil que marcó a toda una generación, convirtiendo su voz y personaje en iconos culturales.
¿Por qué The Climb fue la única canción que Miley interpretó en los últimos años?
The Climb, canción que apareció en la película Hannah Montana: The Movie, se publicó bajo el nombre de Miley Cyrus, no bajo la marca Hannah Montana. Esto permitió que fuera la excepción y que la cantante la interpretara libremente, sirviendo como un puente entre su etapa Disney y su carrera como artista solista.
¿Cómo ha reaccionado Miley ante la posibilidad de reconectar con su pasado musical?
En declaraciones recientes, Miley mostró orgullo y gratitud hacia su tiempo como Hannah Montana. Aunque la etapa terminó hace años y su música evolucionó, ella reconoce que ese capítulo fue fundamental en su vida. Ahora, con la libertad para interpretar esas canciones, ha expresado su emoción por poder finalmente cantar lo que lleva su voz y su cara, cerrando un ciclo y celebrando su legado completo.
Que Miley pueda volver a cantar las canciones de su juventud no significa que vaya a hacerlo en todos sus conciertos. Pero el permiso abre una puerta simbólica: la de reconciliarse con una parte de sí misma que fue tan amada como juzgada.
