La modelo argentina, Valentina Ferrer, se convirtió en una de nuestras más recientes portadas. Su belleza e inteligencia inundan nuestras páginas.
Modelo prodigio, empresaria exitosa, filántropa de corazón, mamá primeriza, novia ejemplar, ¡y hasta ser la mujer más bella de la Argentina! La lista sigue y sigue. Esto es solo una pizca de la multifacética vida de Valentina Ferrer. Aquí, nos adentramos en las experiencias que han moldeado a esta imparable mujer. Desde su infancia hasta sus pasos en el mundo profesional y ahora en su faceta como madre, nuestra estrella de portada nos muestra cómo abraza cada etapa de su vida con pasión y madurez.
¡MAMMA MIA!
Ver a una mujer viviendo una vida tan plena es tan inspirador como poderoso. Saber que una puede, significa que todas también, pero ¿qué se necesita para lograrlo? En conversación para Marie Claire, Valentina Ferrer comparte los secretos y las vivencias que la han llevado a convertirse en la mujer todoterreno que es hoy.
Valentina Ferrer creció entre las montañas de Carlos Paz, Córdoba, en el centro de Argentina, rodeada de la naturaleza y lejos del glamour contrastante del que hoy se rodea.
Fue educada por una madre de fortaleza, temple e inteligencia emocional admirable que siempre puso la libertad —la de ella y sus cuatro hermanos— al centro de la ecuación: ‘Nos enseñó lo que eran los límites, lo que es bueno y malo, pero siempre nos dejó ser […]. Nuestra forma de resolver y ver la vida es muy diferente a muchas otras personas’.
Esa independencia con la que se crio, fue la base perfecta para desarrollarse con plenitud: ‘Cuando las personas no esperan nada de ti, no sientes presión y te sentís libre […] Soy una persona que nunca soñó con ser la número uno del mundo ni nada, entonces todo lo fui haciendo porque me gustaba y lo disfrutaba’.
Todo es cuestión de perspectiva
Si bien navegar entre las aguas del modelaje no es nada fácil, le atribuye a su educación y a la madurez que viene con la edad el poder asimilar las cosas desde otra perspectiva: ‘Para mí, por ejemplo, si decían que estaba con sobrepeso, que tenía que ser flaca o que tenía el cuerpo medio voluptuoso, no me lo tomaba personal. Entendía que así como en un trabajo están buscando a una persona que hable un idioma diferente, pasaba lo mismo en el modelaje. Cuando agarras la carrera más grande [de edad] y empiezas a ver todo objetivamente, lo disfrutas más’.
A pesar de crecer siendo tan desprendida, la Valentina que vemos hoy, no es la misma que conocimos cuando representó a su país en el certamen universal de belleza: ‘Cuando estaba en Miss Argentina era una persona que no sabía donde quería vivir. Cada tres meses me mudaba de país o ciudad. Nunca le tuve miedo a andar sola por todos lados. Para mí era tan simple como agarrar una maleta, buscar una agencia en alguna parte del mundo y moverme. Ahora estoy mucho más asentada. Amo donde vivo, mi casa, mi rutina con mi hijo, mi familia… Uno pasa sus etapas, era demasiado libre antes. Obviamente, fui superfeliz, pero no lo extraño. Amo la vida que tengo ahora’.
Río: el nuevo inicio de la vida de Valentina Ferrer
La maternidad fue el detonante por el que ahora se maneja diferente y sus prioridades han cambiado. En 2021, se convirtió en madre de Río, junto a su actual pareja, el reconocido reguetonero colombiano, J Balvin: ‘Es lo mejor que me ha pasado en la vida. Yo creo que [la maternidad] te hace mucho más fuerte, como si uno se volviera como una leona. También me volví mucho más organizada. Para poder ser una mujer multifacética, que trabaje, que tenga sus propias cosas y que se puede dedicar a su hijo, es importante tener buenos hábitos, si no, no te da’.
Todo en la vida es balance. Hoy, es un ejemplo de una mujer que es y lo puede todo, y lo podemos ver en cada faceta, ya sea como modelo y empresaria o como mamá y pareja. ‘Kapowder —su empresa de productos enfocados en salud y bienestar— ha crecido muchísimo y eso me ha servido. Utilizo los horarios en los cuales Río va al jardín para sentarme sola en mi oficina. Parte de la idea nació porque siempre supe que quería ser mamá y no quería dejar de trabajar cuando lo fuera. Quería tener mi propia empresa, seguir trabajando y poder hacerlo desde casa para poder estar con mi hijo’.
Valentina Ferrer y J Balvin: una encantadora historia de amor
En cuanto a la vida en pareja, encontrar el equilibrio de la mano de José ha sido parte del éxito: ‘Con el tiempo uno va encontrando cómo acomodar la vida con la del otro; y la clave es la comunicación y aprender a hacer equipo, no pensar solamente en uno, sino pensar como familia’.
El amor que vive el día de hoy no es el mismo que en sus primeros días de noviazgo, es una forma mucho más evolucionada que han construido juntos: ‘Seguimos aprendiendo, obviamente. Uno primero aprende a ser novio, pero ya cuando aprendes a ser familia, es totalmente diferente. Si sabes conectar las dos facetas, es superdivertido y muy lindo’.
