El aceite de romero, además de hidratar y promover el crecimiento de nuestro cabello, es conocido por prevenir las canas.
La naturaleza es nuestra principal aliada a la hora de buscar herramientas que nos permitan, además de sentirnos mejor, vernos mejor. Son infinitos los productos que resultan de ella y que, además de ser útiles para el cuidado de nuestra salud, son ideales para fines estéticos. El romero resalta del infinito catálogo, en especial, a la hora de pensar en el bienestar de nuestro cabello. El aceite proveniente de esta planta fortalece nuestra salud capilar, haciendo que tengamos una cabellera brillante y fuerte.
Es tal la importancia de esa planta en nuestra rutina, que algunas marcas especializadas en la creación de productos para nuestro cabello la agregan en su lista de ingredientes. El uso más popular del romero, sin embargo, se hace a través de aceites, de hecho, ese es probablemente el formato más puro de aquella planta, en lo que se refiere a su uso estético.
¿Qué es romero?
De acuerdo con lo que destacan portales especializados, se trata de una hierba originaria de la región mediterránea. Su nombre proviene de la palabra latina rosmarinus que, a su vez, se traduce en rocío del mar. Es también utilizada como alimento, especialmente, en la gastronomía italiana. Así mismo, es bien conocida por su utilidad para hacer infusiones y tés.
En bebida, el romero ayuda en temas de digestión. Así mismo, se le atribuyen poderes en lo que se refiere a nuestro sistema circulatorio. También se considera que es de suma utilidad para estimular el correcto funcionamiento de nuestra memoria.
¿Para qué sirve el aceite de romero en el cabello?
El romero es reconocido, popularmente, por prevenir la caída del cabello, pues se encarga de fortalecer nuestras raíces. Así mismo, es esencial para estimular el crecimiento, pues, además de ayudar con la regeneración capilar, favorece la circulación sanguínea de nuestro cuero cabelludo. Masajear nuestra cabeza con ese aceite, aumentará también la circulación, lo que llevará a que crezcan nuevos cabellos.
Le aporta brillo al cabello, pues es bien conocido por ayudar a limpiar impurezas que quedan en nuestro cabello, bien sea por el uso de otros productos, o por el contacto con la contaminación. Al ser astringente, es de suma utilidad para el control de sebo. Esto termina funcionando, a su vez, en la prevención o la lucha contra la caspa. También nos permite evitar la aparición de hongos o infecciones.
Así como regula el sebo, el romero ayuda a hidratar el cuero cabelludo, es decir, funciona como una especie de acondicionador natural. Al hidratar, además, ayuda a que la fibra capilar deje de ser quebradiza.
Una de las propiedades más populares del romero es que evitaría la aparición de canas. Esto se debe a que estimula el funcionamiento de los melanocitos, aquellos encargados de darle color a nuestro cabello. De alguna manera, hace que el proceso de su aparición sea más lento.
¿Cómo usar el romero en el cabello?
Así como ya hay marcas con líneas completas hechas con romero, y aceites en el mercado que puedes comprar y hacer parte de tu rutina, no olvides que el romero es una planta, razón por la cual tú, desde casa, puedes fabricar tu propio aceite o infusión de romero.
Si vas a usar el romero que viene ya incluido en productos procesados, trata de lavar tu cabello con líneas completas que tengan romero, es decir, que la planta se encuentre en tu champú, acondicionador, cremas y demás. Así reforzarás su actuar en tu cabellera. Si decides usarlo en aceite, o en infusión hecha en agua, es recomendable utilizarlas en la noche, antes de dormir, para que saques más provecho del producto.
También puedes usar el agua o el aceite en las mañanas. Aplica, deja actuar el tiempo que más puedas, y enjuaga. Así mismo, hay quienes usan algunas gotas de romero sobre el cabello limpio y seco, como una especie de fijador, para dejarlo actuar todo el día.
