Estos son los mejores aceites para mantener tu cabello sano y fuerte
El cabello es una de las cosas que más nos preocupa de nosotros mismos a la hora de pensar en nuestra rutina de autocuidado. Tener el pelo sano y fuerte es esencial para muchos de nosotros, en especial, cuando nos gusta experimental con él y someterlo a procedimientos de calor o tintura para cambiar su forma y color. Tener buenas costumbres es de suma relevancia, por lo que desde Marie Claire queremos contarte algunos de los beneficios de usar aceites, sus orígenes y sus beneficios.
Aceite de Argán: oro líquido
Este es probablemente uno de los productos más populares y resonados de los últimos años. De un tiempo para acá, este aceite se encuentra en varios materiales para el cabello como shampoo o acondicionadores. Sus beneficios son tan prometedores que, de hecho, se le conoce como oro líquido. Este elemento surge como producto de los granos del fruto que da el árbol de argán que crece en Marruecos.
De acuerdo con especialistas, este aceite es abundante en vitaminas A y B, además de tener consigo una gran cantidad de antioxidantes. Todo esto permite que al contacto con el cabello ofrezca un efecto hidratante. Sus compuestos hacen que sea un buen acondicionador y que, por ende, ayude a reducir las puntas abiertas. Este aceite, además, facilita el proceso del peinado, pues deja el cabello con una textura moldeable. Basta con poner un par de gotas en las palmas de las manos y aplicarlo de medios a puntas.
Aceite de coco: reparación profunda
Si hablamos de productos que le devuelven la vitalidad al cabello es imposible ignorar al aceite de coco. Este proviene de la nuez del coco y es rico en ácidos grasos esenciales y antioxidantes. Su aplicación permite prevenir y combatir la caspa. Así mismo, ayuda a tratar la resequedad, sea en el pelo o en el cuero cabelludo.
Ayuda a controlar el frizz y, al igual que el de argán, ayuda a que el cabello sea más maleable a la hora de peinarlo. Con el aceite de coco podrás despedirte fácilmente de la textura áspera de tu cabellera seca. Es también reconocido porque sirve para detener la caída del pelo, pues fortalece la raíz. También nos echa una mano para que el cabello crezca un poco más rápido.
Si tienes el cabello graso, trata de que el uso de este aceite sea mínimo o antes de someterlo a un fuerte lavado.
Aceite de ricino: úsalo si necesitas que tu cabello crezca
Si en algo es reconocido el aceite de ricino es en que acelera el crecimiento capilar. Este producto natural tiene abundante ácido ricinoleico dentro de sus componentes, un ácido graso omega-9 que con propiedades hidratantes y antiinflamatorias. Es rico, de la misma manera, en ácidos grasos omega-6 y omega-3, vitamina E y proteínas.
Lo que hace el aceite de ricino con su aplicación es que aumente la circulación sanguínea en el cuero cabelludo, acelerando así el crecimiento.
Aceite de oliva, si quieres un cabello suave
Este producto natural contiene dentro de sus componentes ácidos grasos del tipo omega 3. Dentro de sus propiedades están restablecer la fuerza del cabello quebradizo y débil. Su principal poder es ayudar cabelleras que han sido sometidas a procedimientos externos y, por lo general, dañinos. Este aceite, además, ayuda a la producción de colágeno y a la regeneración celular.
Otra ventaja del aceite de oliva es que funciona como protector térmico, lo que hace que, al sol, el cabello no sufra mayores daños.
Aceite de jojoba: adiós a la caspa
Este proviene de las semillas del arbusto de jojoba. Este elemento permite que el cabello conserve su humedad. Al tener propiedades antifúngicas y antibacterianas, previenen y atacan la caspa o cualquier otro mal en el cuero cabelludo. Se le atribuyen, además, funciones reguladoras de grasa, de hecho, especialistas aseguran que conserva los niveles de pH.
Es importante aclarar que antes de usar cualquiera de estos aceites debes tener claro cuáles son las necesidades de tu cabellera. Asesórate y comienza a darle lo mejor a tu cabello.