Ugly core: cuando vestirse feo es cool.
Conceptos como belleza o fealdad varían de persona a persona, lo que para unos es estético o deseable, para otros puede que simplemente no, y es válido. Desde hace unos años se ha acuñado el término “Ugly Chic” para definir una tendencia disruptiva que se está apoderando de las pasarelas, las redes sociales y el Street Style.
Animal print, estampados, texturas, todo tipo de colores y mucha ironía pueden ser los elementos esenciales para esta tendencia caracterizada por su enfoque experimental. Pero va más allá, pareciera que simplemente se trata de vestir prendas poco favorecedoras al mismo tiempo.
La “moda fea” comenzó a cimentarse de la mano de diseñadores y firmas entre los que destacamos a Vivienne Westwood y Comme Des Garçons para ser posteriormente afianzada por exponentes como Demna Gvasalia en Balenciaga y quizá uno de los ítems más comentados, los famosos “crocs con plataforma de 10 centímetros decorados con pins y joyas”, mismos que un par de años después mutaron, al cambiar su plataforma por un tacón.
Marcas como AVAVAV han llevado este concepto al siguiente nivel, proponiendo prendas que en sí mismas son un concepto y pueden llegar a incomodar a los más conservadores, demostrando que para ser Ugly ya no sólo basta con mezclar prendas al azar, también puedes incorporar elementos cotidianos para “afear” aún más tu look.
Una celebración a la rareza, a la individualidad y a la creatividad. A lo desagradable dirían algunos, pero caer en esto nos llevaría a una discusión con tintes subjetivos de nunca acabar. Firmas como Vetements, Gucci y Dsquared2 han acogido esta propuesta que conquista adeptos temporada tras temporada.
Una tendencia asociada a los movimientos ´´anti fashion´´ que combina elementos diversos que pareciera no combinaran juntos, y que de hecho no combinan, porque esa es la idea.
Para incorporarlo en tu día a día , acude al layering (viste muchos estilos y prendas superpuestas), agrega todo tipo de estampados aunque en teoría no vayan bien juntos (usa patrones florales con print de leopardo por ejemplo) y termina tu atuendo con cualquier cantidad de accesorios que tengas a la mano, aquí el maximalismo y la exageración son la clave.
Recuerda, “nada es más hermoso que la autenticidad, incluso si es feo”.
Escrito por: Damián Torres