Las uñas de jabón son perfectas para evocar elegancia y sofisticación. Son perfectas para el bienestar de nuestra uña.
El minimalismo será siempre una técnica útil que podemos aplicar en cualquier aspecto de nuestra vida. Mantenerlo todo simple y poco llamativo es una decisión que nos permitirá, más allá de no captar atención masiva, vernos elegantes y sofisticadas.
Esta corriente no solo es utilizada en ámbitos como la decoración de nuestro hogar, sino también en aspectos como la moda. La ropa, el maquillaje y la forma en la que llevamos nuestro cabello, pueden ser también evidencia gráfica de ello.
Con la llegada de un nuevo año, y por ende una nueva ola de tendencias, la manera en la que decoramos nuestras uñas también se convierte en una parte fundamental si queremos experimentar con el minimalismo.
¿Cómo son las uñas de jabón?
Se trata de un diseño de manicure que resalta la naturalidad de nuestras uñas, no solo en lo que respecta a su forma, sino también en su color. Y es que este diseño sugiere que nuestra uña pareciera no tener ningún procedimiento encima, más allá de una limpieza. Algo como el no makeup – makeup, pero en nuestras uñas.
Consiste entonces en ponerle colores claros, como el rosa, o tonalidades nude, es decir, que estén cercanas a la gama de nuestra piel. El efecto que da a la vista es que nuestras uñas están recién lavadas y recién intervenidas por un profesional estético. Incluso, hay quienes literalmente las llevan sin ningún tipo de esmalte, con la tonalidad original de la piel, pero con la textura de la uña pulida para conseguir brillo.
¿Cómo crear las uñas jabón o soap nails?
De acuerdo con la descripción ya mencionada de este tipo de uñas, lo necesario será conseguir materiales necesarios para el proceso, y como asumirás, no son tantos. Con tan solo un esmalte conseguirás el efecto deseado, solo dependerá de ti escoger la tonalidad. Lo común es que el acabado sea brillante, para que la uña se vea brillante y limpia.
Puedes optar por una base transparente o lechosa, así como por esmaltes rosas o colores que se asemejen al tono de tu piel. Como se mencionaba antes, también será una alternativa dejar la uña sin esmalte, y solo pulirla para sacar su brillo natural.
Este último método es de suma utilidad si quieres dejar descansar a tus uñas de procedimientos invasivos como lámparas, pegamentos de uñas postizas y geles de alta duración.
También son ideales para disimular el paso del tiempo y el crecimiento de la raíz cuando tenemos esmalte. Aquel espacio que se forma entre la cutícula y el esmalte dejará de ser tan evidente hasta tu próxima sesión con tu manicurista.
