Ectoína: todo sobre el activo de moda para hidratar la piel
En términos de hidratación y antienvejecimiento los activos más populares son: el retinol, la vitamina C o la niacinamida, pero hay un aminoácido que está ganando terreno en el sector de la cosmética.
La ectoína se está popularizando por sus propiedades antiinflamatorias y calmantes, pues entre sus funciones se destacan su actividad como protector ante los agentes externos y su acción calmante frente al enrojecimiento de las pieles más sensibles, representando una alternativa más ligera que la niacinamida.
Este ingrediente es un compuesto orgánico que está presente en algunos microorganismos que crecen en condiciones extremas como temperaturas muy altas, entornos donde se desarrollan gracias a la sintetización de las ectoínas que protegen sus estructuras para lograr sobrevivir. De ahí su connotación de sustancia protectora.
Es un componente perfecto para las pieles que necesiten un aporte adicional de hidratación entre las que encontramos aquellas que presentan una textura seca o sensible, contribuyendo a mantener una piel más flexible y suave, ya que puede aportar mayor protección frente a los rayos dañinos del sol, reduciendo el riesgo de cáncer de piel, y previniendo la aparición de manchas y arrugas.
Funciona perfecto como protector ante los factores ambientales, como los rayos UV y la contaminación gracias a su capacidad antioxidante, al tiempo que fortalece la barrera hidrolipídica, previniendo la pérdida de agua transepidérmica, mejorando la elasticidad de la piel.
A pesar de que se encuentra en una gran cantidad de productos cosméticos, como tónicos regenerantes, cremas hidratantes y sérums anti envejecimiento, lo ideal es acudir al dermatólogo, pues las afecciones de la piel como las rojeces no pueden atribuirse simplemente a una piel sensible, teniendo en cuenta que detrás de ellas pueden existir causas que necesitan un abordaje más complejo y profesional, adaptado a cada caso en específico.
Escrito por: Damián Torres
